Señor Presidente:
Agradecemos a la República Dominicana y el resto de las delegaciones patrocinadoras la presentación del proyecto de resolución L.38 Rev. 1.
Reconocemos la relevancia de esta iniciativa como parte de los esfuerzos para visibilizar y atender el impacto del cambio climático en el disfrute de los derechos humanos, incluidos los derechos al desarrollo y a un medio ambiente limpio, saludable y sostenible.
Saludamos que el proyecto de resolución otorgue preponderancia al principio de responsabilidades comunes pero diferenciadas y las capacidades nacionales respectivas. Este es un principio fundamental en el abordaje de estos temas.
El calentamiento global y el aumento del nivel del mar tiene un efecto desproporcionado en los países con litoral, en particular los Pequeños Estados Insulares en Desarrollo.
Esta no es una amenaza abstracta, sino una realidad concreta que afecta la vida y los derechos humanos de millones de personas.
Agrava la pobreza, la inseguridad alimentaria, la escasez de agua, el desplazamiento forzado y la pérdida de biodiversidad.
Saludamos también que este proyecto reconozca las consecuencias del aumento del nivel del mar en el derecho de los pueblos a la libre determinación, la defensa de la soberanía y el disfrute de los derechos marítimos de los Estados, de conformidad con el Derecho Internacional.
Nuestra delegación aprecia el enfoque inclusivo del texto, que visibiliza el impacto desproporcionado de este fenómeno sobre mujeres, niñas, pueblos indígenas, personas con discapacidad, comunidades afrodescendientes y otros grupos vulnerables. Su participación en el diseño y la adopción de políticas de mitigación y adaptación resulta indispensable para garantizar respuestas justas y eficaces.
Es urgente que los países desarrollados cumplan sus compromisos de financiación climática, transferencia de tecnología y creación de capacidades.
La justicia climática exige que los países que han generado el problema del cambio climático, asuman su responsabilidad histórica y apoyen a los países más vulnerables en sus esfuerzos de adaptación y desarrollo.
Por las razones anteriores, Cuba apoya el proyecto de resolución L.38 Rev.1 y espera que el mismo pueda ser aprobado por consenso.
Muchas gracias.
