Señor Presidente:
La delegación de Cuba tiene el honor de presentar, en nombre de los 35 Estados copatrocinadores, el proyecto de resolución L.4 titulado: “Promoción de un orden internacional democrático y equitativo”.
La transformación del orden internacional actual es una necesidad urgente. Las desigualdades estructurales persistentes y crecientes condenan a los países del Sur al subdesarrollo. Constituyen un obstáculo tangible y significativo a los esfuerzos nacionales para la promoción y protección de todos los derechos humanos.
Estas circunstancias no exoneran a los Estados de su responsabilidad primaria en materia derechos humanos, pero indiscutiblemente imponen serias limitaciones a la plena realización y disfrute de esos derechos.
El proyecto L.4 se basa en lenguajes previamente acordados por el Consejo y toma debidamente en cuenta el recién adoptado “Compromiso de Sevilla”, particularmente lo referido a la cooperación internacional y el cumplimiento de los compromisos de Ayuda Oficial al Desarrollo.
El texto aborda de manera integral y realista los requerimientos de un orden internacional democrático y equitativo, que favorezca la realización de los derechos humanos individuales y colectivos.
Señor Presidente:
Agradecemos a los Estados, organizaciones de la sociedad civil y otros actores que se involucraron de forma activa y constructiva en las consultas sobre el proyecto.
El texto que hoy presentamos es resultado de esa construcción colectiva, transparente e inclusiva.
Lamentamos que algunas delegaciones mantengan una posición rígida y distanciada respecto a las legítimas aspiraciones de avanzar hacia un orden internacional más justo, democrático y equitativo. Hacemos un respetuoso llamado a reconsiderar estas posiciones en el futuro.
Concluyo enfatizando que el texto que estamos presentando es una contribución de buena fé a los esfuerzos por hacer realidad el derecho de toda persona a un orden internacional basado en la inclusión, la justicia social, la igualdad, la equidad, la dignidad humana, la solidaridad, el respeto a la diversidad cultural y a los derechos humanos.
Por las razones expuestas, a nombre de los copatrocinadores, Cuba solicita a los países miembros del Consejo votar a favor del proyecto de resolución L.4.
Muchas gracias.