Interviene la delegación de Cuba, en el debate general del Tema 4 de la Agenda, titulado “Situación de derechos humanos que requieren la atención del Consejo”. 57º período ordinario de sesiones del Consejo de Derechos Humanos.

Señor presidente,

Como hemos denunciado en ocasiones anteriores, bastaría un breve análisis del programa de este tema, para constatar que pareciera que únicamente en el Sur global existen situaciones de derechos humanos que requieren la atención del Consejo. Esto es una construcción ideológica y una falacia que solo persigue fines de dominación geopolítica.

La aprobación de mandatos punitivos contra países en desarrollo, sin el consentimiento del Estado concernido, se ha convertido en la herramienta política para subvertir el orden e interferir en los asuntos internos de aquellos gobiernos que no se someten a las órdenes de las potencias occidentales.

Señor presidente,

Nos continúa preocupando que el Consejo no se alarme por los tratos inhumanos que reciben decenas de miles de migrantes en países desarrollados. De igual manera, que no se cuestione la brutalidad policial contra afrodescendientes y las muertes de inocentes a manos del negocio lucrativo de las armas, por solo citar unos ejemplos.

Es vergonzoso el doble rasero con el que los mismos que piden duras sanciones y mecanismos de rendición de cuentas contra países soberanos, hacen silencio o utilizan pretextos absurdos para no condenar el genocidio que se está cometiendo en Gaza contra el pueblo palestino.

El gobierno de los EE.UU. es cómplice del delito de genocidio y ha enviado más de 50 mil toneladas de ayuda militar a Israel con el único objetivo de matar.

Pero ese gobierno no solo es responsable de delitos internacionales. Al interior de sus propias fronteras es incapaz de frenar la brutalidad policial y el racismo institucionalizado en la aplicación de la ley.

Sus leyes laborales permiten que menores de 12 años trabajen legalmente en la agricultura y menores de 18 años sean condenados a penas de cadena perpetua. Es el único país que no es parte de la Convención sobre los Derechos del Niño.

Recientes investigaciones pusieron al descubierto preocupantes casos de abuso sexual y trabajo infantil en proyectos implementados durante años por la USAID en países africanos, institución acostumbrada a mentir para lograr fines subversivos.

Señor presidente,

Cuba continuará insistiendo en la urgencia de rescatar los objetivos centrales de diálogo respetuoso y cooperación constructiva por los que debe regirse este Consejo.

Muchas gracias.

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