Señor Presidente:
Tomamos nota de la presentación de la relatora. Coincidimos con las preocupaciones que expresa, en relación con los riesgos que corren los defensores de derechos humanos en muchas partes del mundo, incluyendo aquellos que trabajan en el ámbito de la corrupción.
En nuestro país, cabe destacar el papel protagónico que juega la sociedad civil en la prevención y lucha contra la corrupción, incluyendo las organizaciones estudiantiles, las facultades de Economía, Derecho y Contabilidad, así como las organizaciones profesionales pertinentes.
Señor Presidente:
Cuba reitera su apoyo a la labor de los defensores de derechos humanos. Seguimos preocupados por el empleo indiscriminado e injustificado que en ocasiones se da a dicho término. Este mandato está en una posición privilegiada para defender el uso adecuado de este importante calificativo. Cuba reafirma su compromiso con el diálogo y la cooperación con la Relatora hacia este importante objetivo.
Rechazamos de manera categórica la manipulación de mecanismos de derechos humanos de la ONU, por parte de algunas organizaciones o individuos, con el fin de promover campañas de desinformación políticamente motivadas, que incluyen, pero no se limitan, a la promoción de noticias falsas, manipulación de hechos y fabricación de mentiras artificialmente potenciadas en redes sociales, entre otros graves hechos.
Los titulares de mandato deben ser debidamente asesorados por la Oficina de la Alta Comisionada, para verificar cuidadosamente la información que reciben y proteger la credibilidad de tan importantes mecanismos. El cumplimiento del Código de Conducta no es una opción, sino una obligación.
Muchas gracias.