El pueblo haitiano vuelve a vivir una etapa de catástrofe, al ocurrir el sábado último un sismo de gran magnitud, con cifras preliminares de 1 300 muertos y 5 700 heridos, más la destrucción de más de 13 000 edificaciones. Bajo esas condiciones, una brigada médica cubana con 253 profesionales socorre a las víctimas, y hasta este domingo habían ofrecido unas 600 atenciones a pacientes que llegaron con traumas craneoencefálicos, fracturas, heridas, contusiones, aplastamiento y quemadura de fricción. La situación pudiera ser más dramática si la depresión tropical Grace generara más daño a la isla caribeña de La Española, como advertían los pronósticos, en un momento también de azote de la COVID-19, que hasta la fecha ha dejado 576 fallecidos y más de 20 000 contagios entre los haitianos. La ayuda médica de Cuba a ese país vecino comenzó en 1998, con unos 350 colaboradores, a raíz de la destrucción ocasionada por los huracanes George y Mitch. Luego, en 2010, se incrementó a más de 700, a quienes se sumaron 380 egresados de la Escuela Latinoamericana de Medicina. El terremoto de ese año mató al menos 300 000 personas. Cuba reforzó la presencia médica en ese país y desarrolló un Plan para la Reconstrucción y Fortalecimiento del Sistema de Salud haitiano, con la colaboración de otros países como Venezuela, Brasil, México, Chile y Noruega. Leer más: https://www.minrex.gob.cu/es/la-ayuda-cubana-haiti