Las verdaderas restricciones que limitan el acceso a internet en Cuba:
En su edición del viernes 6 de abril de 2018, El Telégrafo reproduce una nota de la Agencia AFP, bajo el título “Restricciones no limitan a los youtubers cubanos”. Desafortunadamente, una vez más, este diario se hace eco, de una posición superficial y mal intencionada, que al analizar el tema del acceso a internet en Cuba, soslaya la razón fundamental para las limitaciones que sufre el país, y que no es otra que el genocida bloqueo económico, comercial y financiero que impone, desde hace casi 60 años, el gobierno de los Estados Unidos a nuestro país.
El bloqueo norteamericano afecta sensiblemente toda la vida económica y social de nuestro país y las comunicaciones y la informática no son una excepción. Esta irracional política es el obstáculo principal que impide que los cubanos podamos disfrutar de una infraestructura adecuada, destinada a alcanzar mayor y mejor acceso a internet.
Como es conocido, EE.UU. acapara el emporio mundial de las tecnologías informáticas y ejerce un control hegemónico en esa actividad. Bastaría con señalar que la Internet Corporation for Assigned Names and Numbers, institución que provee las direcciones IP y nombres al resto del mundo, está limitada para brindar servicios a Cuba, por encontrarse nuestra Isla sujeta a las prohibiciones que establecen la Oficina Federal para las Comunicaciones y el Departamento de Estado del gobierno norteamericano.
Adicionalmente, el gobierno de los Estados Unidos no permite la conexión de Cuba al dominio de internet, a pesar de que la infraestructura de cables marinos que permitiría esto, bordea el archipiélago cubano.
Habría que señalar que el bloqueo contra Cuba, solo durante el año 2017, ha causado perjuicios que exceden los 69 millones de dólares al sector de las comunicaciones y la informática, incluidas las telecomunicaciones en Cuba. Ello significa más de 9 millones de dólares más que en igual período del año 2016. Las pérdidas están asociadas básicamente a ingresos dejados de percibir, pérdidas por la reubicación geográfica de nuestros mercados de insumos electrónicos e informáticos que totalizan alrededor de 38 millones de dólares en gastos adicionales para el país y por la imposibilidad de acceder a equipos de altas prestaciones y líderes en el mercado de las telecomunicaciones, distribuidos por empresas norteamericanas.
El restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Cuba y los Estados Unidos, propició la concreción de acuerdos para interconexiones directas con cuatro empresas estadounidenses en el sector de las telecomunicaciones, sin embargo, ha sido imposible concretar y llevar a vías de hecho los mismos, en tanto persisten los riesgos financieros y comerciales impuestos por el bloqueo estadounidense.
Si realmente nos queremos referir a las restricciones que limitan el acceso a Internet en Cuba habría que mencionar, sin lugar a dudas:
- La imposibilidad de establecer relaciones bancarias directas entre instituciones financieras cubanas y estadounidenses.
- La imposibilidad de acceder al mercado estadounidense para adquirir el equipamiento tecnológico necesario, lo cual encarece y limita nuestras compras.
- La imposibilidad de acceder a determinadas marcas y/o equipos de altas prestaciones y líderes en el mercado de las infocomunicaciones, simplemente por ser distribuidas o estar registradas por entidades estadounidenses.
- El temor que imponen las elevadas penalidades con que se puede sancionar a empresas productoras y comercializadoras que negocien con Cuba.
Intentar acusar a Cuba de no incrementar el servicio de internet sin mencionar siquiera el impacto de esta criminal política norteamericana es una verdadera infamia.