Nueva York, 24 de septiembre de 2019. El canciller cubano Bruno Rodríguez Parrilla, fue invitado a participar hoy, en el lanzamiento del número de octubre de la revista estadounidense MEDICC Review. El número, estuvo dedicado a los aportes de Cuba a la salud universal mundial, a través de la cooperación sur-sur y tuvo como escenario a la Fundación Ford. El evento tiene lugar un día después que se celebrara en las Naciones Unidas una reunión de Alto Nivel sobre Cobertura Universal de Salud
Participaron en el evento, Gail Reed, editora ejecutiva de la publicación; la Dra. Rosie Mills del Centro Comunitario William Hodson Center en el Bronx, New York; entre otros representantes de ONGs e instituciones estadounidenses. Por la parte cubana, asistieron la Embajadora Ana Silvia Rodríguez Abascal, Representante Permanente Alterna de Cuba ante la ONU; el Embajador José R. Cabañas, máximo representante cubano ante EEUU; Carlos Fernández de Cossio, Director General de Estados Unidos en la cancillería cubana, entre otros diplomáticos de la isla.
El Ministro de Exteriores cubano, quien agradeció la invitación, reflexionó acerca de cómo a pesar de todos los avances científicos actuales y la inmensa riqueza acumulada, la mitad de los 7.300 millones de habitantes del planeta siguen sin disponer de servicios básicos de salud. Ello, agregó, significa que, de los 60 millones de muertes en 2016, el 54% fueron causadas por las diez principales enfermedades curables.
El representante de la diplomacia cubana, explicó que el sistema de salud cubano, se basa en la idea de que el acceso a la atención médica para todos es un derecho humano, y que garantizar dicho acceso es una obligación de todos los Estados cuando existe un mínimo sentido de justicia social, algo que está reflejado en la constitución de la isla.
Explicó que Cuba, cuenta con las garantías que ofrecen un compromiso honesto y una firme voluntad política del gobierno para poner a disposición de la población todos los recursos necesarios para alcanzar los notables indicadores de salud que el mundo actual celebra. Añadió, que ello a pesar del brutal bloqueo económico estadounidense, que no impide que el sistema de salud cubano sea universal y gratuito.
Para el sistema de salud pública de Cuba, los ciudadanos no son clientes, sino pacientes o individuos sanos cuyo bienestar debe ser protegido y promovido con enfoques de prevención, enfatizó el canciller.
Rodríguez Parrilla, dedicó buena parte de su intervención a ilustrar la solidaridad, como valor adicional y definitorio en la raíz del sistema de salud cubano. Destacó que la cooperación sanitaria internacional que Cuba ha brindado en los últimos 60 años ha beneficiado a millones de personas en 164 países, en un esfuerzo que se ajusta claramente a las pautas de la cooperación Sur-Sur que las Naciones Unidas han venido promoviendo desde el decenio de 1970.
Misión Permanente de Cuba ante Naciones Unidas.