El Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia condenó “enérgicamente” este martes el ataque perpetrado contra la Embajada de Cuba en Estados Unidos el 24 de septiembre, cuando un individuo arrojó dos cócteles molotov a la sede diplomática.
La portavoz de la Cancillería rusa, María Zajárova, afirmó que el acto no debe quedar impune y los responsables “deben ser castigados de forma severa”. Desde Moscú esperan que las autoridades estadounidenses lleven a cabo “una investigación rápida y exhaustiva sobre todas las circunstancias de lo sucedido”.
No se trata del primer ataque de esta clase cometido contra la legación cubana en Washington, recordó Zajárova. Asimismo, señaló que el delito se produce en un contexto en el que “Estados Unidos continúa fomentando un clima de amenazas” contra el Gobierno cubano.
Previamente, desde La Habana calificaron el ataque de “terrorista”. Se informó que tanto el personal diplomático como el técnico no sufrieron daños durante el incidente.
Por su parte, el portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Matthew Miller, indicó el lunes que “los ataques y amenazas contra instalaciones diplomáticas son inaceptables”.