Lo cínico e inmoral de esta decisión cruel y vengativa de la Administración de Estados Unidos, es que lo hacen a solo unos días de su salida bochornosa y con la finalidad de entorpecer cualquier intento de mejorar las deterioradas relaciones diplomáticas con la nueva Administración de EE.UU., que asumirá sus funciones a partir del 20 de enero próximo.