Nueva York, 4 de noviembre del 2016. Cuba reiterósu preocupación por la tendencia de imponer en el Consejo de Derechos Humanos la selectividad y los dobles raseros en la consideración de las situaciones de derechos humanos. “El Consejo requiere hoy ser rescatado de la selectividad y la manipulación política que caracterizan su labor en el tratamiento de situaciones de países. La cooperación y el diálogo respetuoso deberían guiar las labores de este órgano.”, consideró hoy al dirigirse al Plenario de la 71 sesión de la Asamblea General de las Naciones Unidas la Embajadora Ana Silvia Rodríguez Abascal, Representante Permanente Alterna de Cuba ante las Naciones Unidas.
Como parte del debate general del tema “Informe del Consejo de Derechos Humanos”, la Embajadora cubana expresó que el Examen Periódico Universal se consolida como el único mecanismo universal existente para el análisis integral de la situación de derechos humanos en todos los países. Asimismo, insistióen que el Consejo debe continuar pronunciándose a favor de un orden internacional democrático mientras persista un orden económico y político internacional injusto y excluyente y que, “mientras se impongan medidas coercitivas unilaterales y se mantengan férreos bloqueos, como el que Cuba sufre desde hace más de 50 años, el Consejo debe rechazar y exigir el fin de estas prácticas”.
Al referirse al proyecto de resolución “Declaración sobre el Derecho a la Paz”, presentado por la delegación cubana, consideró “Nos anima el interés de que la paz, ya reconocida como condición fundamental para el disfrute de todos los derechos humanos; reciba también el reconocimiento que merece como el derecho de todas las personas, individual y/o colectivamente, a contribuir a los esfuerzos que se desarrollen para alcanzar la paz, y a gozar de un ambiente de armonía que les permita la satisfacción plena de sus necesidades, y el total respeto de los derechos humanos individuales y colectivos.”
Al finalizar su intervención la diplomática cubana aseguróque Cuba seguirá trabajando en la promoción de los derechos de los pueblos a la libre determinación, a la paz y al desarrollo, por la realización del derecho a la alimentación, por el establecimiento de un orden internacional democrático y equitativo, en el combate al racismo, la xenofobia y todas las formas de discriminación, por la realización de los derechos culturales y el respeto a la diversidad. Así, ratificó el compromiso imperecedero de la nación cubana con la promoción y respeto de todos los derechos humanos para todos. (Misión Permanente de Cuba ante las Naciones Unidas)