Señor Presidente:
Tomamos nota de la presentación del Relator Especial y de sus informes. Coincidimos en que debe garantizarse la inclusión de las minorías en los procesos de planificación y adopción de decisiones, así como priorizar la participación de mujeres, niñas y jóvenes pertenecientes a las minorías.
En ese sentido, es muy preocupante la situación de los derechos humanos de las minorías étnicas en los países desarrollados. No solo han sido sometidas a siglos de vasallaje, saqueo, desplazamiento o confinamiento forzado, incluso en sus propias tierras, sino que en pleno siglo XXI permanecen bajo inaceptables condiciones de segregación, racismo y discriminación institucionalizada.
Muchos de los países en que se promueven o permiten estas violaciones, son los que emplean este Consejo para intentar dar lecciones a otros sobre derechos humanos y democracia.
Señor Presidente:
Tomamos nota de que en la pasada sesión del foro sobre minorías se solucionaron algunas de las deficiencias identificadas en ediciones anteriores, y saludamos la eficaz conducción de su Presidenta.
Reiteramos la necesidad de que en el Foro se hagan cumplir las normas que rigen el funcionamiento de los órganos de Naciones Unidas, incluido un control más estricto sobre quiénes y bajo qué criterio pueden participar. Un espacio dedicado a cuestiones tan sensibles e importantes, no debe verse lastrado por la politización.
Señor Presidente,
Reiteramos que los procedimientos especiales deben adherirse estrictamente al Código de Conducta, y, en su interacción con los Estados, abstenerse de participar en acciones que van más allá de su mandato.
Muchas gracias.