72 AGNU: Intervención de la Delegación de la República de Cuba en el Debate Temático sobre “Otras medidas de desarme y seguridad internacional”. Primera Comisión. Nueva York, 24 de octubre de 2017.

Señor Presidente:

La comunidad internacional debe adoptar medidas concretas y urgentes para que los recursos que hoy se destinan a fines militares, se reorienten hacia actividades generadoras de desarrollo económico y social y de una vida digna para todos los seres humanos. Ello contribuiría al mantenimiento de la paz y seguridad internacionales.

Cuba ha propuesto que entre las medidas concretas a adoptar, se cree un fondo internacional de las Naciones Unidas, al que se destine la mitad de los actuales gastos militares, con el objetivo de apoyar el desarrollo de los Estados miembros y de alcanzar los Objetivos de Desarrollo Sostenible.

Al propio tiempo, Cuba ha destacado que los Estados miembros, en la implementación de los tratados y medidas sobre desarme y control de armamentos, deben dar estricto cumplimiento a las normas ambientales.

Reiteramos también la vigencia del multilateralismo como principio básico de todas las negociaciones en materia de desarme y no proliferación; y que el proceso multilateral de toma de decisiones, por conducto de las Naciones Unidas, en estricta observancia de la Carta y los principios del derecho internacional, constituye la única manera efectiva de salvaguardar la paz y la seguridad internacionales.

Señor Presidente:

Es necesario promover a nivel multilateral posibles estrategias para prevenir y enfrentar las amenazas reales y potenciales en la esfera de la seguridad de la información.

El único camino para evitar que el ciberespacio se convierta en un teatro de operaciones militares, es la cooperación mancomunada entre todos los Estados. Cuba considera necesario también, como otra medida de desarme y seguridad, establecer un marco regulador internacional jurídicamente vinculante, complementario al Derecho Internacional existente, aplicable a las Tecnologías de la Información y las Telecomunicaciones.

Reiteramos que el uso hostil de las telecomunicaciones, con el propósito declarado o encubierto de subvertir el ordenamiento jurídico y político de los Estados, es una violación de las normas internacionalmente reconocidas en esta materia y constituye un uso ilegal e irresponsable de estos medios, cuyos efectos pueden generar tensiones y situaciones desfavorables para la paz y la seguridad internacionales y afectar negativamente la integridad de la infraestructura de los Estados.

Nos preocupa gravemente el empleo encubierto e ilegal, por individuos, organizaciones y Estados, de los sistemas informáticos de otras naciones para agredir a terceros países, por sus potencialidades para provocar conflictos internacionales.

Señor Presidente:

En la Segunda Cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC), en 2014, la región de América Latina y el Caribe fue proclamada como Zona de Paz; entre otros objetivos, para fomentar las relaciones de amistad y de cooperación entre sí y con otras naciones, independientemente de las diferencias existentes entre sus sistemas políticos, económicos y sociales o sus niveles de desarrollo, practicar la tolerancia y convivir en paz como buenos vecinos.

Sin embargo y en violación de esta Proclama, de los propósitos y principios de la Carta de las Naciones Unidas, el Derecho Internacional y las disposiciones de la Unión Internacional de Telecomunicaciones, Cuba es agredida de modo permanente desde el exterior.

El espacio radioeléctrico cubano es agredido  mediante transmisiones radiales y televisivas ilegales   que difunden programaciones especialmente diseñadas para incitar al derrocamiento del orden constitucional libremente establecido por el pueblo cubano.

Como promedio, durante el 2016, se transmitieron de manera ilegal contra Cuba, 1875 horas semanales a través de 25 frecuencias desde el territorio de los Estados Unidos. Hasta julio de este año se habían transmitido 1890 horas.

Cuba exhorta, una vez más, a que se ponga fin de inmediato a estas políticas agresivas y lesivas a su soberanía, que resultan, además, incompatibles con la paz, la seguridad, el desarrollo y con la cooperación entre los Estados. También espera que se levante el bloqueo económico, comercial y financiero, que ha causado serios daños, con efectos nocivos en el área de la información y las comunicaciones, entre otras esferas de la vida cotidiana del pueblo cubano.

Muchas gracias.