Señor Presidente:
La delegación de Cuba suscribe la intervención realizada por la delegación de la República Bolivariana de Venezuela en nombre del Movimiento de Países No Alineados.
Nuestro país, por defender su independencia y soberanía, ha sufrido las consecuencias de terribles actos terroristas, organizados, financiados y ejecutados desde el extranjero, que han costado la vida a 3 478 personas y han incapacitado a otras 2 099, y que en su mayoría fueron organizados, financiados o permitidos por el gobierno de los Estados Unidos y cometidos por personas bajo su control y amparo.
Haber sido víctima por décadas del terrorismo de Estado, ha fortalecido la posición de principios e inquebrantable voluntad de Cuba en contra del terrorismo, refrendada nuevamente por la recién aprobada Constitución de la República.
Cuba repudia y condena todos los actos, métodos y prácticas terroristas en todas sus formas y manifestaciones, por quienquiera, contra quien quiera y dondequiera sean cometidos, sean cuales fueren sus motivaciones, incluido el terrorismo de Estado.
Reiteramos que el gobierno revolucionario cubano jamás ha permitido, ni permitirá, la utilización del territorio nacional para la realización, la planificación o el financiamiento de actos de terrorismo contra ningún otro Estado, sin excepción de tipo alguno.
Señor Presidente:
Condenamos la práctica nociva, ilegal y violatoria de los principios de la Carta de las Naciones Unidas de determinados Estados, que financian, apoyan o promueven actos terroristas y subversivos dirigidos a atentar contra el orden constitucional de otros estados, imponer “cambios de régimen” y difunden mensajes de intolerancia y odio contra otros pueblos, culturas o sistemas políticos. Para ello recurren incluso, al mal uso y abuso de las modernas tecnologías de la información y las comunicaciones como herramienta para tergiversar y manipular la realidad en aras de imponer sus intereses.
En ese contexto, reiteramos nuestra más enérgica condena al sabotaje contra el sistema eléctrico de Venezuela, que constituye un acto terrorista dirigido a dañar a la población indefensa de toda una nación, a la que utilizan como rehén de la guerra no convencional desatada por los Estados Unidos contra el gobierno legítimo que preside el compañero Nicolás Maduro Moros y la Unión Cívico-Militar del pueblo bolivariano y chavista.
La comunidad internacional tampoco puede aceptar que bajo la bandera de una supuesta lucha contra el terrorismo, determinados Estados cometan actos de agresión, menoscaben la soberanía nacional, se inmiscuyan en los asuntos internos de otros Estados, o cometan violaciones flagrantes de los derechos humanos y del derecho internacional humanitario.
Rechazamos de manera firme los dobles raseros, la selectividad política y los actos unilaterales de determinados Estados, al pretender certificar conductas y elaborar listas políticamente motivadas y contrarias al derecho internacional. Ello socava la autoridad central de la Asamblea General de las Naciones Unidas en la lucha contra el terrorismo.
Señor Presidente:
Cuba reafirma su compromiso de seguir cooperando y participando activamente en los esfuerzos de las Naciones Unidas en el combate al flagelo del terrorismo, de conformidad con los propósitos y principios de su Carta y del derecho internacional, con la firme convicción de que corresponde a ésta Organización liderarlo.
En cumplimiento del compromiso asumido como Estado Parte de 18 convenciones internacionales en materia de terrorismo, Cuba ha puesto en vigor medidas legislativas, institucionales, administrativas y de diversa índole, para prevenir y sancionar todos los actos y actividades terroristas, incluidas los que se vinculan con la financiación del terrorismo.
Cuba cuenta con una norma penal específica para el enfrentamiento a las conductas delictivas de carácter terrorista, la Ley 93 Contra actos de terrorismo. Adicionalmente, la legislación penal cubana tiene tipificados los delitos de Lavado de Dinero y de Financiación al Terrorismo.
El Estado cubano estableció un Comité Coordinador para la prevención y enfrentamiento al financiamiento al terrorismo y a la proliferación de armas de destrucción masiva, así como al lavado de activos y sus delitos determinantes. Asimismo, el Banco Central de Cuba cuenta con una Dirección General de Investigación de Operaciones Financieras, que funciona como una Unidad de Inteligencia Financiera encargada de recibir, investigar y analizar los reportes de transacciones sospechosas de financiamiento al terrorismo.
Con la incorporación de Cuba al Grupo de Acción Financiera Internacional para América Latina (GAFILAT), en diciembre de 2012, el Banco Central de Cuba firmó el “Memorando de Entendimiento para la cooperación” entre países miembros de GAFILAT. Como parte de ese mecanismo, Cuba ha suscrito 19 convenios de cooperación en materia de inteligencia financiera y participa en la Red de Recuperación de Activos.
El compromiso y la capacidad institucional de Cuba para prevenir el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo, fue reconocido por el Grupo de Acción Financiera Internacional (GAFI) en 2014. Nuestro país quedó insertado en la red mundial de unidades de inteligencia financiera desde el 2015, con la incorporación de Cuba al Grupo Egmont.
Señor Presidente:
Para concluir, deseamos reiterar que el combate al terrorismo en todas sus formas y manifestaciones requiere un enfoque integrador mediante el enfrentamiento directo, la prevención y acciones concretas para erradicar sus causas raigales. Resulta también indispensable prestar asistencia y cooperación internacional para la creación y fortalecimiento de las capacidades en el combate al terrorismo.
Cuba ha demostrado con ejemplos prácticos su permanente disposición a cooperar con cualquier Estado en el ámbito bilateral o multilateral en la prevención y el enfrentamiento al terrorismo internacional, siempre sobre la base del respeto mutuo y de las normas del derecho internacional.
Muchas gracias.