77 AGNU: Intervención del Embajador Yusnier Romero Puentes, Representante Permanente Alterno de Cuba ante las Naciones Unidas, en el debate temático “Armas Nucleares”. Primera Comisión. Nueva York, 18 de octubre de 2022.

Señor Presidente:

Suscribimos la declaración formulada por Indonesia en nombre del Movimiento de Países No Alineados.

Setenta y siete años han transcurrido desde que Estados Unidos, el único país que ha empleado el arma nuclear, sembró destrucción y muerte en Hiroshima y Nagasaki. Las consecuencias devastadoras de ese acto criminal evidenciaron la necesidad imperiosa de la eliminación total de las armas nucleares, de forma transparente, verificable e irreversible.

Casi ocho décadas después, la mera existencia de las armas nucleares continúa amenazando a la humanidad. Es injustificable e inaceptable que todavía hoy existan más de 13 mil armas nucleares, de las cuales cerca de 4 mil están desplegadas, listas para su empleo inmediato.

Abogamos por el abandono de las posturas y doctrinas militares sustentadas en la disuasión nuclear, la estabilidad estratégica, o la necesidad de “crear las condiciones para el desarme nuclear”. Rechazamos los intentos de condicionar el desarme nuclear y legitimar el status quo.

Señor Presidente:

El firme compromiso de Cuba con el desarme nuclear ha sido una posición consistente con los principios de nuestra política exterior, refrendados en la Constitución de la República.

Bajo esta máxima, para Cuba, el desarme nuclear es y debe continuar siendo la más alta prioridad en la esfera del desarme.

En consecuencia, durante la presidencia cubana de la Conferencia de Desarme, uno de nuestros principales objetivos fue la promoción del desarme nuclear. Abogamos por la negociación en ese foro de un instrumento jurídicamente vinculante, universal e incondicional, que brinde garantías de seguridad irreversibles para los Estados que, como Cuba, no son poseedores de armas nucleares; así como de otro instrumento que prohíba la producción de material fisionable para la fabricación de armas nucleares u otros dispositivos de igual naturaleza.

Acogimos con satisfacción la reanudación de las labores sustantivas de la Comisión de Desarme en 2022. Exhortamos a que este órgano adopte recomendaciones específicas sobre desarme nuclear, a presentar a la Asamblea General.

Por iniciativa de nuestro país, apoyada por el MNOAL, la Asamblea General de la ONU aprobó designar el 26 de septiembre como “Día Internacional para la Eliminación Total de las Armas Nucleares”. Recordamos el llamado del MNOAL a promover la participación constructiva de todos los Estados miembros en las reuniones plenarias de alto nivel de la AGNU para conmemorar esa fecha, las cuales serían ocasión propicia para la interacción entre los Estados poseedores de armas nucleares y los no poseedores.

Nos complace haber participado en la elaboración y negociación del Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares, primer instrumento jurídicamente vinculante que refrenda el carácter ilegal de este tipo de armamento. Encomiamos la celebración exitosa de su Primera Reunión de Estados Parte. Continuaremos promoviendo la universalización de este Tratado.

Es crucial también la entrada en vigor del Tratado para la Prohibición Completa de los Ensayos Nucleares.

Lamentamos el fracaso de la Décima Conferencia de Examen del Tratado sobre la No Proliferación de Armas Nucleares (TNP), que volvió a concluir sin ningún resultado acordado, lo que socava la credibilidad del Tratado y nos aleja aún más del objetivo de un mundo libre de armas nucleares.

Señor Presidente:

Apoyamos el establecimiento de una Zona Libre de Armas Nucleares y otras armas de destrucción en masa en el Medio Oriente.

Nos enorgullece pertenecer a la primera Zona Libre de Armas Nucleares en un área densamente poblada, posteriormente proclamada como Zona de Paz, lo cual nos compromete aún más a continuar promoviendo un mundo libre de armas nucleares.

Ratificamos nuestro pleno apoyo al Plan de Acción Integral Conjunto con Irán y el rechazo a la retirada de Estados Unidos del Acuerdo.

Nos oponemos a la imposición de sanciones y medidas coercitivas unilaterales, que limitan o restringen el derecho legítimo de todos los Estados a desarrollar la investigación, la producción y el uso de la energía nuclear con fines pacíficos. Condenamos el bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por Estados Unidos contra Cuba, que constituye un ejemplo de ello.

Cuba hace un llamado a abstenerse de realizar acciones que agudicen, aún más, la tensa situación en la península coreana. Condenamos la imposición de injustas medidas económicas unilaterales contra la República Popular Democrática de Corea y la injerencia externa en sus asuntos. Solo a través del diálogo y las negociaciones, se puede lograr una solución política duradera a la situación en la península, que tome en cuenta las preocupaciones legítimas de todas las partes involucradas.

Señor Presidente:

No pierden vigencia las palabras del Comandante en Jefe de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz, cuando expresó: “Basta ya de la ilusión de que los problemas del mundo se pueden resolver con armas nucleares. Las bombas podrán matar a los hambrientos, a los enfermos, a los ignorantes, pero no pueden matar el hambre, las enfermedades, la ignorancia”.

Destínense los miles de millones de dólares que hoy se dilapidan en la modernización y ampliación de las armas nucleares a atender las necesidades reales de nuestra humanidad. Inviértanse en la erradicación del hambre, la pobreza, las enfermedades, la ignorancia y las consecuencias del colonialismo y del injusto orden económico internacional.

Muchas gracias.