Señor Presidente:
Lo felicitamos por su elección como Presidente de esta sesión anual de la Comisión de Desarme. Extendemos nuestras felicitaciones también a los miembros de la Mesa. Pueden contar con el pleno respaldo de la delegación de Cuba.
Apoyamos la declaración pronunciada por Indonesia en nombre del Movimiento de Países No Alineados, que refleja las legítimas aspiraciones de más de dos tercios de los Estados miembros de las Naciones Unidas. Confiamos en que serán consideradas con la seriedad y urgencia que merecen.
En esta sesión, debemos avanzar para que, el próximo año, al cierre del ciclo de los trabajos, podamos adoptar recomendaciones concretas a presentar a la Asamblea General para el logro del objetivo prioritario del desarme nuclear. No pueden seguir prevaleciendo los condicionamientos que han dilatado este propósito.
Como representantes de un país de la región de América Latina y el Caribe, proclamada Zona de Paz, y Estado Parte del Tratado sobre la Prohibición de las Armas Nucleares, el TNP, el Tratado de Tlatelolco y el CTBT, insistimos en el imperativo moral y legal de un mundo libre de armas nucleares. Es inconcebible que hayan pasado casi 80 años de los bombardeos atómicos de Estados Unidos sobre Hiroshima y Nagasaki, y que aún persista la amenaza que representa la existencia misma de las armas nucleares para la humanidad.
Señor Presidente:
Valoramos que esta Comisión aborde también el impacto de las tecnologías emergentes en la paz y la seguridad internacionales, con vistas a desarrollar entendimientos comunes. Sin embargo, reiteramos que es crucial evitar duplicaciones con otros foros. Favorecemos, en cambio, que las discusiones se centren en la dimensión militar de la inteligencia artificial, un tema que exige deliberaciones en el marco de la ONU, con la participación de todos los Estados en pie de igualdad. El MNOAL ha presentado elementos esenciales a tener en cuenta en los debates al respecto.
Para Cuba, el multilateralismo es el único camino viable para avanzar en las negociaciones internacionales en materia de desarme. Ante los intentos de socavar este principio básico y el rol de las Naciones Unidas, en general, se hace más necesario que nunca que esta Comisión y el resto de los órganos de la maquinaria de desarme, sin excepción, cumplan el mandato para el que fueron creados.
Muchas gracias.