Señor Vicepresidente,
Señor Secretario General,
Excelencias y colegas,
Agradecemos la declaración del Secretario General y su continuo compromiso con la realización efectiva de las actividades operacionales para el desarrollo. Cuba se suma a la declaración de Iraq en nombre del G-77 y China y de Palau en nombre de AOSIS.
El reposicionamiento debe seguir reforzando el pilar del desarrollo y respetando el liderazgo nacional, siendo la erradicación de la pobreza su máxima prioridad y principal objetivo, tal como lo reconoce la resolución A/RES/79/226.
El apoyo de las entidades del Sistema asociadas al pilar de desarrollo resulta fundamental para la consecución de la Agenda 2030 en sus 5 años restantes. En este sentido, desearíamos conocer la línea estratégica que seguiría el Sistema para tratar de recuperar el terreno perdido en cuanto a la consecución de los ODS.
Según el informe del Secretario General, las contribuciones financieras al Sistema de Desarrollo se redujeron en un 16% solo en 2023, lo que equivale a una pérdida de 9 mil millones de dólares. Dentro de este retroceso, destaca la disminución de los recursos básicos, lo que revela una preocupante falta de voluntad política de muchos países desarrollados para cumplir con sus compromisos hacia el desarrollo del Sur.
Es particularmente alarmante que mientras se exige al Sistema de Desarrollo que sea más eficiente, más coordinado y más ambicioso en su alcance, se le impongan restricciones financieras cada vez mayores.
La llamada “crisis de desarrollo” no es solo consecuencia de las múltiples crisis globales, sino también del incumplimiento de los compromisos históricos de apoyo al desarrollo. Persisten los condicionamientos, las prioridades impuestas y la resistencia a canalizar recursos a través de mecanismos comunes, flexibles y predecibles.
Urge corregir el desequilibrio financiero actual, si queremos un sistema de desarrollo eficaz. Los países en desarrollo no pueden seguir subsidiando una arquitectura financiera que los margina.
Cuba reafirma su llamado a fortalecer el pilar de desarrollo de las Naciones Unidas con recursos suficientes, predecibles y sin ataduras. Solo así será posible avanzar hacia una cooperación internacional justa, equitativa y verdaderamente transformadora.
Muchas gracias.