(Dakar, 22 de noviembre, 2024) El honorable político senegalés Guy Marius Sagna departió en la mañana de este viernes con la embajadora de Cuba Maydolis Sosa Hilton, en una entrañable conversación donde se puso de manifiesto por qué Cuba es un referente para el continente africano gracias a la inmensa obra humanista de la Revolución y su líder histórico Fidel Castro Ruz.
Profundo estudioso también de la obra de José Martí, el intenso defensor del panafricanismo, y antimperialista consumado, reiteró su compromiso con el pueblo cubano, en total empatía con las luchas de la isla por sostener los principios sagrados de libertad y soberanía, a pesar del prolongado bloqueo impuesto por los Estados Unidos de América desde hace más de 60 años.
En todos los escenarios posibles, y en circunstancias donde los principios democráticos y constitucionales sean vulnerados, y más aún, cuando la injerencia o las sanciones unilaterales vayan en detrimento de los hombres y mujeres dignos de un estado libre e independiente, allí siempre ha estado la voz y autoridad de Marius Sagna.
Una ardua hoja de ruta dentro de la Asamblea Nacional de la República de Senegal y en la Comunidad Económica de los Estados de África Occidental (CEDEAO), avalan su prestigio y el activismo, ya que Senegal, en lo particular, y África en general, necesita preservar sus valores cívicos y ciudadanos, siempre que se sepan escuchar las preocupaciones del pueblo como verdadera manifestación de la soberanía.
Los reclamos de la comunidad internacional a lo largo de 32 votaciones en la ONU en relación con la resolución que pide poner fin al bloqueo, han resonado en el espíritu y conciencia de todo aquel que defienda la dignidad.
En su caso, su nombre figura entre los casi 600 parlamentarios de 73 países que escribieron una carta conjunta, coordinada y publicada el pasado 20 de septiembre por la Internacional Progresista, en la que condenan la designación de Cuba por los Estados Unidos como «Estado patrocinador del terrorismo».
Sosa Hilton aprovechó la ocasión para agradecer ese gesto cargado de simbolismo, porque los procesos de integración que ha fomentado Cuba, y la ayuda prestada en defensa de los derechos sagrados de los pueblos africanos, han formado parte de la agenda de humanismo y solidaridad de la mayor de las Antillas.
Uno de los momentos más emotivos del intercambio en la Embajada de Cuba, fue cuando la diplomática puso en sus manos una iconografía del Comandante Fidel Castro. Hoja tras hoja, foto tras foto, fueron rememorando un ideal surgido desde muy joven cuando las primeras motivaciones políticas llevaban el rostro del revolucionario cubano y los héroes que supieron hacer una revolución frente a uno de los estados imperialistas más fuertes; y construir una sociedad donde salud, educación, deporte, acceso a la cultura y capacidad de resistencia formaban parte de derechos indiscutibles, conquistas, e inspiración para todas las causas progresistas y de izquierda del mundo.
Se evocó que el próximo 25 de noviembre, Cuba y los amigos del mundo entero estarán recordando el octavo aniversario de la desaparición física de una de las personalidades más trascendentales, transformadoras y visionarias de la historia del siglo XX.
No tardó Marius Sagna en dejar su impresión en la red social Facebook luego del amistoso y sincero encuentro con esa parte de la mayor de las Antillas dignamente representada en tierra de la Teranga:
“He sido recibido hoy, por invitación suya, por S.E. la Embajadora de Cuba en Dakar, Maydolis Sosa Hilton, para manifestar el apoyo y muestras de solidaridad con el pueblo cubano en la lucha por el fin del bloqueo impuesto por Estados Unidos a Cuba hace más de 60 años, así como mi apoyo a la petición internacional de retirar a Cuba de la lista de países patrocinadores del terrorismo. Me siento honrado de haber sido invitado”.
Un “Patria o muerte, ¡Venceremos!” selló su convicción profunda de que, no solo el bloqueo contra Cuba es injusto, inaceptable e intolerable, sino que su condena cuenta con la firme posición de todos aquellos que le consideran una violación flagrante del Derecho Internacional y la Carta de Naciones Unidas. (EmbaCuba Senegal)
