Señores y señoras:
Pronto se cumplirá el cincuenta y cinco aniversario de aquel histórico día del año 1961, en el que cientos de miles de cubanos colmaron la Plaza la Revolución, para proclamar a Cuba “Territorio Libre de Analfabetismo”. Un año en que cada cubano que supiera leer y escribir llevaría a las más apartadas regiones de Cuba, la luz de la enseñanza y la verdad.
Un millón de analfabetos, casi la sexta parte de la población, y más de un millón de semianalfabetos era la herencia educativa que nos dejara aquella oscura época neocolonial.
A solo dos años del triunfo revolucionario, el pueblo cubano libraba, en medio de bloqueos económicos y agresiones militares, una de las batallas más importantes, con un impacto social y cultural sin precedentes. Una batalla contra la ignorancia, contra la exclusión social, contra la desigualdad.
La campaña nacional de alfabetización, impulsada por el gobierno revolucionario cubano, bajo el liderazgo de Fidel, fue una obra de infinito amor. En cada integrante de ese gran ejército alfabetizador, de más de 250 000 voluntarios, había un revolucionario convencido, un fervoroso martiano, un maestro que no esperaba nada a cambio de su sacrificio. Ningún alfabetizador buscaba comodidades, ni preguntaba si las tendría; ningún alfabetizador reclamaba derechos, a no ser el de estar en el lugar donde pudiera contribuir mejor a la victoria.
Ese ejercito liberador de la ignorancia, cuya composición social reflejaba la gran participación de todo un pueblo, y en el que destacaron los más de 100 000 jóvenes involucrados, hizo realidad un sueño que parecía imposible de alcanzar en tan breve tiempo.
Se alfabetizaron 702 212 personas, con lo que se redujo la tasa de analfabetismo de un 23,6% a un 3,9%.La campaña no solo permitió erradicar el analfabetismo en Cuba sino que facilitó el acceso universal a los distintos niveles de educación de manera gratuita.
En 1964 la Organización de Naciones Unidades para la Educación, la Ciencias y la Cultura (UNESCO) publicaba un informe sobre la gesta alfabetizadora en Cuba que destacaba…“La Campaña no fue un milagro sino una difícil conquista, lograda a fuerza de trabajo, de técnica y de organización…El secreto del éxito de la Campaña ha de buscarse en un hecho muy sencillo, muy antiguo y ajeno a todo medio técnico: la relación humana”.
Estimados señoras y señores:
Cuando la UNESCO celebra este mes de septiembre el 50 Aniversario del día mundial de la Alfabetización, lo hace bajo el lema " leyendo el pasado, escribiendo el futuro. Y justamente nuestra Campaña Nacional de Alfabetización fue un hito que marcó el rumbo a seguir de la política educativa cubana y su proyección internacional actual.
Cuba fue primer país de América Latina y el Caribe en declararse territorio libre de analfabetismo, en 1961 y el único país de la región, que en el año 2015, alcanzó los 6 objetivos del Programa Educación para Todos, recogidos en los Objetivos del Milenio.
El liderazgo de Cuba en materia de Alfabetización tiene sus bases en aquella histórica campaña. Su contribución a la erradicación del analfabetismo a nivel mundial es un referente internacional. Mediante la aplicación del método de alfabetización cubano “Yo Sí puedo”, han sido alfabetizadas cerca de 10 millones de personas, en 30 países de diferentes regiones del mundo. Ello hizo que en el 2006 la UNESCO entregara al método cubano el Premio Internacional de Alfabetización Rey Sejong.
Ante los nuevos compromisos adquiridos con la adopción de laAgenda de Desarrollo 2030, la alfabetización sigue ocupando un lugar fundamental, como base del desarrollo sostenible, a fin de crear mayores oportunidades de aprendizaje que permita erradicar los más de 781 millones de analfabetos que existen en el mundo.
Muchas gracias
Embacuba Austria