El presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, recorrió hoy la Ciudad Prohibida o Museo del Palacio Imperial, un sitio milenario que marca exactamente el corazón de Beijing, la capital de China.
El gobernante conoció en una visita guiada sobre la construcción e historia del lugar que fue el centro del poder de las dinastías Ming (1368-1644) y Qing (1644-1911).
Apreció las dimensiones, la magnífica arquitectura, esplendor, elegancia de objetos culturales y artísticos de este laberinto de casi mil edificios, cuyos tejados están adornados con figuras de criaturas mitológicas.
Díaz-Canel dejó constancia de su paso por el complejo al plasmar su firma en un libro.
La Ciudad Prohibida fue bautizada con dicho nombre, porque las personas corrientes no podían entrar sin permisos especiales en aquella época, a excepción de los cortesanos.
Allí vivieron 24 emperadores hasta 1911, cuando tuvo lugar la revolución que derrocó al régimen de la última dinastía feudal de China, la Qing.
El recorrido por el Museo del Palacio Imperial fue la segunda actividad de Díaz-Canel tras llegar este miércoles a Beijing procedente de la municipalidad de Shanghái (este), donde abrió ayer su primera visita oficial a China como mandatario de Cuba.
(Con información de Prensa Latina)