Y ahí la primera razón por la que es conveniente que vengan los médicos cubanos: tienen una experiencia de décadas -su primera brigada colaboró en Argel, en 1963- en situaciones de epidemias y otras catástrofes en muchos países, con tal éxito y reconocimiento, que recientemente se ha propuesto que el próximo Premio Nobel de la Paz sea para los médicos cubanos.
La irracional política migratoria estadounidense hacia Cuba y la poca preocupación del gobierno estadounidense en torno a los hechos ocurridos, como se palpó en la no respuesta a las notas de advertencia de la Isla, espolearon a que, el 1ro de abril de 1980, penetrara por la fuerza en la embajada del Perú en La Habana un grupo de elementos antisociales que habían secuestrado un ómnibus, ocasionando en la arremetida la muerte al custodio cubano Pedro Ortiz Cabrera.