Misión cumplida: luego de su participación durante varios meses en el primer epicentro europeo de la pandemia de Covid-19, los médicos cubanos enviados a Italia regresaron a La Habana, dónde recibieron distinciones oficiales. Cuba recibió triunfante a sus médicos enviados por dos meses a Italia para ayudar en la lucha contra el coronavirus. Estos regresaron al país el 8 de junio, al final de la tarde, por el aeropuerto internacional José Martí, en La Habana. Con rostro fatigado, pero blandiendo las banderas italiana y cubana a la salida del avión, la brigada medica, compuesta por 36 médicos, 15 enfermeros y un administrador, aterrizó proveniente de Milán, como lo informa la Agencia Francia Prensa (AFP) y como lo testimonian las imágenes retransmitidas en directo por la televisión cubana. La prudencia a la que obligan estos tiempos de pandemia, hizo que fuese por una gran pantalla interpuesta que el presidente Miguel Díaz-Canel les rindió un sincero homenaje, desde la sala del Consejo de Ministros, acompañado por varios miembros del gobierno. En un tweet, expresó su emoción y su admiración. “Un abrazo desde el corazón y los sentimientos, desde la distancia física”, comentó, expresando su gratitud hacia estos profesionales de la salud.
Con sus mascarillas, guantes y batas blancas, todos los médicos recibieron cada uno una rosa roja y una medalla durante una ceremonia oficial en el aeropuerto de la capital, del cual partieron el 22 de marzo hacia Lombardía, que en aquel momento era el epicentro de la enfermedad.
“Ustedes representan la victoria de la vida sobre la muerte, de la solidaridad sobre el egoísmo, del ideal socialista sobre el mercado [...] Ustedes han mostrado al mundo una verdad, que los enemigos de Cuba han pretendido silenciar o de tergiversar: la fortaleza de la medicina cubana”, expresó el jefe de Estado a los galenos.
Con varias misiones en el extranjero efectuadas antes de esta, estos aguerridos profesionales de la salud regresan con el sentimiento del deber cumplido. “En Italia se realizó un duro trabajo ya que la región de Lombardía era el epicentro del Covid-19, pero como en las misiones anteriores, supimos dar lo mejor de nosotros”, cuenta Carlos Carrilla, enfermero de 53 años, citado por la AFP: “Tuvimos éxito, trabajamos bien y salvamos vidas”, celebró. Decano de la brigada, el doctor Leonardo Fernandez de 68 años, cumple con esta su octava misión en el exterior: “Estuve en Nicaragua, en Haití luego del terremoto y después del de Pakistán, [...] en la lucha contra el Ebola en Nigeria, en Mozambique estuve dos veces”, explicó a la agencia de prensa. Este es un testimonio que refleja el internacionalismo cubano desarrollado desde décadas por La Habana en el sector de la salud.
Una experiencia reconocida a nivel internacional
Recientemente calificados de “esclavos” por Washington o incluso vilipendiados por el jefe de Estado brasileño bajo sospecha de espías entre los profesionales de la salud cubana, estos participan desde 1960 en un vasto programa de solidaridad internacional, implementado por el país luego de la revolución. La cooperación médica internacional de Cuba consiste, por una parte, en el envío de personal médico al extranjero o en el recibimiento de pacientes en Cuba, y por otra parte en la formación de estudiantes de medicina en el país. Según L’Humanité, en total, 400 000 trabajadores de la salud han participado en misiones en 164 países, sobre todo en Ucrania en 1986, luego del accidente de Chernóbil, en el que 26000 personas fueron tratadas por personal médico cubano.
(Tomado de La Nation Arabe / Traducción: EmbaCuba-Argelia)